Pellet: el combustible ecológico, práctico y de alta resistencia
El pellet es un producto hecho con serrín, prensado y en forma cilíndrica, que puede tener diferentes tamaños 1,5-2 cm y 6 mm de diámetro. La compactación de este tipo de combustibles caracterizan su alto poder calorífico (p.c.i. 4.000-4.500 kcal/kg).
El pellet se distingue per la baja humedad (inferior al 12 %) y por su elevada densidad, y también por la regularidad del material. El proceso de producción está en el trabajo con leña virgen, no tratada con corrosivos, colas o barnices; es, pues, un producto ecológico.
Es un recurso muy cómodo ya que permite una autonomía de combustión hasta para un par de días. Esta autonomía se controla electrónicamente por un panel sinóptico de última generación que regula el régimen de funcionamiento, diversificándolo entre las varias franjas horarias del día y en los diversos días de la semana, según las exigencias y las necesidades.
Esta es una solución que garantiza una gestión del calentamiento a favor de la practicidad y del confort, para vestir la casa, conseguir un rápido bienestar y un ambiente acogedor.
Estufas de pellet: mucho más que una estufa
Comodidad y calentamiento que se pueden programar.
Las estufas de pellet se realizan mediante una tecnología muy avanzada para conseguir un calentamiento ecológico y un ahorro energético.
La estufa de pellet se puede instalar sin dificultad en casas o apartamentos dentro de la ciudad con el uso de una tubería de reducidas dimensiones.
Los revestimientos de las estufas de pellet, en acero, cerámica y piedra natural, garantizan una gran presencia estética y una óptima adaptabilidad, ya sea en ambientes tradicionales como en ambientes modernos.
La gran autonomía de calentamiento y la programabilidad semanal automatizada son detalles que hacen aun más grandes y únicas las estufas de pellet.
